Receso académico en 10 de los 11 recintos de la UPR por elecciones y paro laboral

 


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La Universidad de Puerto Rico (UPR) decretó un receso académico y administrativo desde hoy, 31 de octubre, hasta el miércoles, 6 de noviembre, en 10 de sus 11 recintos, a raíz de un paro indefinido anunciado por el Sindicato de Trabajadores.

“Vamos a continuar dialogando con los líderes del Sindicato de Trabajadores hasta llegar a unos acuerdos que favorezcan a ambas partes”, indicó el presidente de la universidad de Puerto Rico, Luis Ferrao, en declaraciones escritas.

Este receso coincide con las elecciones generales que se celebrarán el 5 de noviembre, durante las cuales varios recintos funcionarán como centros de votación.

Se informó que las clases y labores administrativas se reanudarán el jueves, 7 de noviembre de 2024. Sin embargo, el Recinto Universitario de Mayagüez será la única unidad académica que continuará con sus actividades durante este periodo.

Por su parte, David Muñoz, presidente del sindicato, dijo que, “La administración tiene la responsabilidad de identificar alternativas a nuestros planteamientos indistintamente de que haya o no actividad universitaria. El receso no puede significar un detente a la identificación de soluciones a lo establecido en la estipulación de septiembre. De lo contrario al regreso del receso , el paro continuará indefinidamente”.

Nuevo escándalo en la UPR de Río Piedras con residencias de la Facultad

 Investigaciones hechas por Radio Universidad revelan nuevo escándalo con residencias de la Facultad en el Recinto de Río Piedras.  

No concluida la investigación sobre anomalías en las becas presidenciales, un nuevo escándalo aflora en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR). 


Se trata de graves irregularidades en el manejo y administración de las Residencias de la Facultad.  

Según una investigación realizada por el Departamento de Noticias de Radio Universidad, al menos 16 propiedades de las Residencias de la Facultad del Recinto riopedrense son ocupadas de forma ilegal debido a múltiples irregularidades.

El presidente del Consejo General de Estudiantes (CGE) del recinto, Guillermo Guasp Pérez, denunció que existen “casos de profesores que llevan más del tiempo límite que establece la normativa, tienes personas que hicieron títulos de propiedad sobre esa propiedad y esas residencias que son en realidad propiedad de la UPR y que han fallecido y han pasado esos títulos de propiedad a los residentes o familiares inmediatos… y personas que están en los cuerpos de gobernanza que viven allí cuando incumplen con esta normativa”.


 El líder estudiantil añadió, que durante un proceso de divorcio se incluyó una de las propiedades en la repartición de bienes inmuebles y quien permaneció viviendo en la residencia no fue el docente.   

Las declaraciones de Guasp, en su mayoría, fueron secundadas por la profesora Luz Myriam Tirado, Catedrática de la Facultad de Estudios Generales, y representante del Senado Académico ante el Comité Especial de Residencias de Facultad desde el año 2001 al 2009.  

 

“Residían personas, y esto sí sé que todavía pasa, residen personas que no son docentes. Hay una persona que de hecho es empleada de facilidades  que estuvo casada con un profesor, se divorciaron hace décadas y ella permaneció viviendo en la residencia.  Había personas que enviudaban o se divorciaban y permanecían residiendo (en el complejo de viviendas), había personas que no tenían ninguna relación con el recinto, y… había gente residiendo que tienen propiedades en Puerto Rico”, destacó la profesora.


Tirado señaló que las irregularidades antes mencionadas fueron reveladas en una investigación que iniciaron cuando comenzó a formar parte del Comité, ya que no encontraron ninguna reglamentación escrita sobre la administración de las residencias. Como resultado de ese estudio se creó la Certificación Número 100 del año 2004 de la Junta de Síndicos, para la administración, operación, y mantenimiento de las Residencias de Facultad de los Recintos de Mayagüez, Río Piedras y Cayey.


La Certificación 100 establece que se otorgará contrato de arrendamiento a profesores visitantes, de nuevo reclutamiento, o en servicio activo con causa justificada. No obstante, Guasp Pérez explicó que luego de que docentes han fallecido, permanecen segundas generaciones habitando en las propiedades de la Institución.  

“Hay casos de hijos y hasta nietos. Aquí lo que vemos en las Residencias de la Facultad es un espacio donde la ley y la normativa nunca han estado presente. Sí se han dado unos pasos para ponerlo en vigor (el reglamento), pero no se ha hecho de la manera correcta”, señaló Guaso Pérez.  


La Certificación establece, además, un periodo de dos años para el arrendamiento de las viviendas, renovable por un periodo adicional de dos años. Aun así, Tirado afirmó que al día de hoy hay múltiples casos de docentes que tiene un contrato vencido y se resisten a abandonar las propiedades.  


Tanto la catedrática como el líder estudiantil lamentaron que durante décadas hayan prevalecido estas irregularidades en el complejo de residencias de Facultad de la institución universitaria y reclamaron acción urgente por parte de la Administración.


Mar 7, 2016 


La desaparición de lugares históricos en la UPR.

 A través de los años la UPR, Rio Piedras ha perdido estructuras que formaron parte de la historia de ese Recinto.   Aqui varias estructuras que desaparecieron para nunca mas volver.

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La Casa Klumb


Considerado una figura central en la historia arquitectónica de la isla, Henry Klumb fue un diseñador modernista alemán que vivió y trabajó la última mitad de su vida en la isla. Aunque se le conoce sobre todo por el diseño del campus de la UPR en Río Piedras, la Casa Klumb es la obra más personal del arquitecto, que sirve de plano e invitación a pensar en el trabajo como un esfuerzo de colaboración hacia el progreso social.  Cuando empezó a trabajar en el campus universitario de Río Piedras, Klumb compró un rancho cercano que se convertiría en su hogar. Con la estructura principal ya construida, Klumb renovó la casa de madera del siglo XIX utilizando este lenguaje modernista, insistiendo en su creencia hacia un diseño más consciente de la sociedad y logrando este objetivo al introducir la naturaleza en los espacios. Se deshizo de todos los muros exteriores, exponiendo la mayoría de las habitaciones a la cobertura verde circundante, diseñó todo su mobiliario para que fuera móvil, moviéndose con la luz del sol a lo largo del día, e integró jardines con cuerpos de agua y palmeras alrededor de la estructura central. En un esfuerzo de colaboración con su esposa, Else Schmidt, la casa se convirtió en un estudio donde intentaban crear dinámicas que favorecen las interacciones humanas dentro de un espacio mediante el uso de materiales nativos de la comunidad en la que vivían.


Publican en 80 Grados:   El lunes 9 de noviembre hablaba con un colega sobre la Casa Klumb.  Comentábamos que, por su avanzado estado de deterioro, perderla era solo cuestión de tiempo. Fue quizás una señal de mal augurio porque el miércoles siguiente el primer mensaje que recibí en mi celular leía: “Hola LuzMa. Se quemó Casa Klumb. No quedó nada, solo las columnas del sótano y la escalera….” Las imágenes que empezaron a circular por las redes sociales confirmaron la fatídica reducción de la singular obra arquitectónica a carbón y escombros. En seguida, comenzaron a registrarse tanto las críticas como las propuestas y, por supuesto, las (auto)exculpaciones. Durante el resto de la semana aparecieron en los rotativos también, múltiples columnas de opinión escritas por arquitectos reconocidos del país. No voy a discutir esas columnas aquí. Prefiero dedicar estas líneas a la propiedad comenzando por destacar que la Casa Klumb fue prácticamente la única obra de arquitectura en Puerto Rico que formó parte de la exhibición de 2015 titulada Latin America in Construction: Architecture 1955-1980 que se presentó el Museo de Arte Moderno (MoMA, por sus siglas en inglés) de Nueva York,   por Luz Marie Rodríguez López


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RESIDENCIAS DE LA FACULTAD

Estructuras que sirvieron de residencia para los profesores visitantes y los que venían de distintos pueblos de la isla, llenaron una necesidad que fue dejada en el olvido.  Este lugar donde enclavan varias casas de una planta se encuentran actualmente (2024) en estado de abandono sin mantenimiento y los alrededores cubiertas de maleza.  Ademas que han administrado estas propiedades como si fueran propiedad privada de varias personas que de forma ilegal han dispuesto de las mismas como parte de sus bienes privados.  Estas estructuras y los terrenos donde enclavan pertenecen a la UPR y se han realizado varias transacciones ilegales y de apropiación ilegal agravada, incluyendo falsificación de documentos que están bajo investigación por tratarse de actos de corrupción donde se encuentran funcionarios del recinto y profesores y sus familiares envueltos.

Nuevo escándalo en la UPR de Río Piedras con residencias de la Facultad

Investigaciones hechas por Radio Universidad revelan nuevo escándalo con residencias de la Facultad en el Recinto de Río Piedras.  

No concluida la investigación sobre anomalías en las becas presidenciales, un nuevo escándalo aflora en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR). Se trata de graves irregularidades en el manejo y administración de las Residencias de la Facultad.  

Según una investigación realizada por el Departamento de Noticias de Radio Universidad, al menos 16 propiedades de las Residencias de la Facultad del Recinto riopedrense son ocupadas de forma ilegal debido a múltiples irregularidades.

El presidente del Consejo General de Estudiantes (CGE) del recinto, Guillermo Guasp Pérez, denunció que existen “casos de profesores que llevan más del tiempo límite que establece la normativa, tienes personas que hicieron títulos de propiedad sobre esa propiedad y esas residencias que son en realidad propiedad de la UPR y que han fallecido y han pasado esos títulos de propiedad a los residentes o familiares inmediatos… y personas que están en los cuerpos de gobernanza que viven allí cuando incumplen con esta normativa”

El líder estudiantil añadió, que durante un proceso de divorcio se incluyó una de las propiedades en la repartición de bienes inmuebles y quien permaneció viviendo en la residencia no fue el docente.   

Las declaraciones de Guasp, en su mayoría, fueron secundadas por la profesora Luz Myriam Tirado, Catedrática de la Facultad de Estudios Generales, y representante del Senado Académico ante el Comité Especial de Residencias de Facultad desde el año 2001 al 2009.  

 

“Residían personas, y esto sí sé que todavía pasa, residen personas que no son docentes. Hay una persona que de hecho es empleada de facilidades  que estuvo casada con un profesor, se divorciaron hace décadas y ella permaneció viviendo en la residencia.  Había personas que enviudaban o se divorciaban y permanecían residiendo (en el complejo de viviendas), había personas que no tenían ninguna relación con el recinto, y… había gente residiendo que tienen propiedades en Puerto Rico”, destacó la profesora.

Tirado señaló que las irregularidades antes mencionadas fueron reveladas en una investigación que iniciaron cuando comenzó a formar parte del Comité, ya que no encontraron ninguna reglamentación escrita sobre la administración de las residencias. Como resultado de ese estudio se creó la Certificación Número 100 del año 2004 de la Junta de Síndicos, para la administración, operación, y mantenimiento de las Residencias de Facultad de los Recintos de Mayagüez, Río Piedras y Cayey.


La Certificación 100 establece que se otorgará contrato de arrendamiento a profesores visitantes, de nuevo reclutamiento, o en servicio activo con causa justificada. No obstante, Guasp Pérez explicó que luego de que docentes han fallecido, permanecen segundas generaciones habitando en las propiedades de la Institución.  

“Hay casos de hijos y hasta nietos. Aquí lo que vemos en las Residencias de la Facultad es un espacio donde la ley y la normativa nunca han estado presente. Sí se han dado unos pasos para ponerlo en vigor (el reglamento), pero no se ha hecho de la manera correcta”, señaló Guaso Pérez.  


La Certificación establece, además, un periodo de dos años para el arrendamiento de las viviendas, renovable por un periodo adicional de dos años. Aun así, Tirado afirmó que al día de hoy hay múltiples casos de docentes que tiene un contrato vencido y se resisten a abandonar las propiedades.  

Tanto la catedrática como el líder estudiantil lamentaron que durante décadas hayan prevalecido estas irregularidades en el complejo de residencias de Facultad de la institución universitaria y reclamaron acción urgente por parte de la Administración.


















Se impone la politiquería.

Tal como lo veníamos denunciando, el mollero politiquero se hizo realidad tras la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico (UPR) i...